Handshake es un protocolo de código abierto descentralizado para nombrar y enrutar recursos de Internet. Su objetivo es reemplazar el actual sistema centralizado del Sistema de Nombres de Dominio (DNS) con una solución descentralizada basada en blockchain. El proyecto se centra en crear una Internet más justa y accesible, donde todos puedan registrar y controlar sus propios nombres de dominio sin tener que depender de autoridades centralizadas.
La arquitectura descentralizada de Handshake se basa en una cadena de bloques, específicamente, una bifurcación de la cadena de bloques de Bitcoin. La cadena de bloques Handshake utiliza un nuevo algoritmo de consenso llamado "Proof of Work Name Service (PoWNS)" que está diseñado para ser más eficiente energéticamente que los algoritmos tradicionales de consenso de prueba de trabajo utilizados en otros proyectos de blockchain.
El protocolo Handshake utiliza un nuevo tipo de criptomoneda llamada HNS (Handshake coin) como el principal medio de interacción con la red. Los usuarios pueden usar HNS para registrar nuevos nombres de dominio, transferir nombres de dominio existentes y pagar por otros servicios de red.
Una de las principales características de Handshake es su naturaleza descentralizada. A diferencia de los sistemas DNS tradicionales que dependen de un pequeño número de autoridades centralizadas para administrar la zona raíz y controlar la asignación de nombres de dominio, Handshake está completamente descentralizado y controlado por sus usuarios. Esto significa que cualquiera puede registrar un nombre de dominio en la red Handshake sin la necesidad de pasar por un intermediario centralizado.
Otra característica clave de Handshake es su enfoque en la privacidad y la seguridad. El protocolo está diseñado para ser más resistente a la censura y la vigilancia que los sistemas DNS tradicionales. Por ejemplo, los nombres de dominio de Handshake no están asociados con direcciones IP específicas, lo que dificulta que terceros rastreen y monitoreen las actividades de usuarios específicos.
Handshake también tiene como objetivo crear una Internet más equitativa y accesible al facilitar que las comunidades desatendidas registren y controlen sus propios nombres de dominio. Esto incluye comunidades en países en desarrollo, así como grupos marginados como los pueblos indígenas y la comunidad LGBTQ+.
El apretón de manos tiene una serie de casos de uso potenciales más allá de los nombres de dominio. Por ejemplo, podría usarse para crear redes sociales descentralizadas, aplicaciones descentralizadas (dApps) y otros servicios descentralizados.
A pesar de estos desafíos, Handshake tiene una comunidad fuerte y dedicada de desarrolladores y entusiastas que trabajan para construir y promover el proyecto. Si tiene éxito, Handshake tiene el potencial de revolucionar la forma en que se organiza y controla Internet, convirtiéndolo en un lugar más equitativo, accesible y seguro para todos.
En conclusión, Handshake es un proyecto ambicioso y prometedor que tiene como objetivo crear una Internet más descentralizada, justa y segura. Utilizando la tecnología blockchain y un nuevo algoritmo de consenso, el protocolo Handshake tiene como objetivo reemplazar el actual sistema DNS centralizado con un sistema más descentralizado y controlado por el usuario. Con el creciente interés y apoyo de la comunidad en general, Handshake tiene el potencial de convertirse en un jugador clave en el desarrollo de la próxima generación de Internet.